BLEQUES

“Mis actividades han sido siempre vinculadas a la literatura. Fui co fundador del Hot Club de Montevideo, que es uno de mis berretines así como fui colaborador del Club de la Guardia nueva en Soriano y Minas”.
De esos primeros tiempos Sclavo contó anécdotas que delinean a un Montevideo muy diferente al actual.

“El Hot Club estaba en Guayabo y Jackson, muy cerca del bar Las copitas y de varias casas non sanctas. Íbamos y veníamos en el trillo, en los dos clubes éramos más o menos los mismo. Un período estupendo que tuvo el Cordón, totalmente independiente. Podían sitiarlo que tenía todo. Y teníamos una sucursal que era la calle Andes con boliches, confiterías, bares, timba, dados, el auditorio del Sodre...era un país cuervo que vivía de las guerras y estaba floreciendo”.

Tal es su pasión por el tango que hasta tiene elegido el que quiere que le pongan “cuando esté en el cajón”: Negracha “muchachos no pongan ninguna otra cosa, por Pugliese, por supuesto”.

De muchos tangos dice: “qué buena la música y ¡qué espantosa la letra!”, afirma. “Debo decir que a mi la gente cantando no me gusta tanto como me gustan los instrumentos” Con una excepción: “Gardel. Era un instrumento él. Eso me lo hacía notar mi amigo Manolo Guardia, que es un gran improvisador”.

Desde su perspectiva, es bueno que se versione la obra de ciertos compositores intérpretes. “Cuando vos sos el autor y el director de la obra, a veces te perdés cosas a las que otro le saca más provecho”.

Entre los grandes nombres, destaca “de Horacio Salgán hemos aprendido muchísimo. No tuvo esa carrera sostenida de Piazzolla. Troilo fue un modernista, pero de un modo muy cuidadoso, prácticamente sacaba por año un tema como Grillito, A fuego lento”.

De este hombre muy cercano a la Guardia Nueva señala “era tal la pureza que decía: ‘por favor muchachos no escuchen música mientras se afeitan, la música cuesta muchísimo hacerla...”.

Sclavo también reverencia a Astor Piazzolla, a quien “Buenos Aires despreciaba y Montevideo fue la primera que lo reivindicó. Cuando empezó tocaba en galpones de tierra en las condiciones más desastrosas”.

Recuerda que asistió en vivo al período en que Piazolla “había grabado en París Marrón y Azul, la presentación del octeto era totalmente revolucionaria porque poner una guitarra eléctrica...Nos cambió el mate a todos los que tuvimos la suerte de ir a la sala Verdi”.

Finalmente el escritor, humorista y publicista define “yo estoy amamantado con leche de clemencia, como decía el viejo Alberti”.



Jorge "Cuque" Sclavo (Montevideo 1936).-

Escritor, libretista, publicitario. Autor de cuatro libros de narrativa: "Un lugar para Piñeiro", 1966, primer premio de la Feria Nacional de Libros y Grabados; "Primer cielo, primera tierra", 1972, premio del MEC; "De los espejos y los feroces que son", 1985, premio de la IMM; "Almanario", 1994 (cuentos ilustrados por Fidel Sclavo). También publicó libros de humor.

Escribió el libreto para "La Pensión 64", programa humorístico de Radio Carve e intervino en varios programas de Radio Sarandí. Fué autor de libretos para programas televisivos entre ellos el de la Familia Rodelú para el programa Decalegrón en Canal 10.

Fue actor, adaptador y director en Club de Teatro y Teatro Circular.

Entre 1988 y 1994 participó en espectáculos de café concert junto a Manolo Guardia y Eduardo Useta.

Trabajó durante 12 años como creativo de la empresa Grey de publicidad.

Ha hecho recopilaciones de textos de Peloduro, el Hachero, Elina Berro , y otros. Ha escrito letras para las murgas La Censurada y Diablos Verdes.

Escribió textos de humor en publicaciones tales como Marcha, Peloduro, La Democracia, Jaque, El Dedo, Guambia, Brecha y Búsqueda.

http://www.sodre.gub.uy.asp1-4.websitetestlink.com/Sodre/Sodre/Servicios/RadiodifusiónNacionalSodre/Radiosyservicios/EmisoradelSur947





Las fotos pertenecen a los archivos del HOT CLUB DE MONTEVIDEO.Gracias EDGARDO FALERO.-